18/03/2011
La belleza de la Madre en el inmenso dolor de perder a su único Hijo.
Foto obtenida de la maravillosa página www.cruzalzada.com donde podéis ver el impresionante reportaje.Hay un calvario encerrado en San Pedro de Sevilla
un calvario en el silencio de rumor de maravillas,
un calvario que nos hace viajar unos dos mil años
a otra ciudad, otro tiempo y con las mismas rencillas.
Hay un calvario que habla de una Madre sencilla,
que es la belleza serena en el dolor sin mancillla
y que acepta sin pensarlo a Juan como estirpe divina
porque Ella es todo amor y el Crucificado su estima.
Hay un calvario señores, que junta a las dos orillas
la del Arlanzón del norte y el Guadalquivir en Sevilla,
que el que está muerto en la cruz, nos ama y nos dulcifica
pues sabemos que no es el fin esa buena muerte escrita.
Hay un calvario precioso sevillano en su capilla
que me lleva a otros tiempos y a cabeza de Castilla
un calvario de elegancia de tronío y maravilla
un calvario de Esperanza, mi calvario en Sevilla.
Saludos.
Trompeta-sangre.
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